Quienes trabajamos hace mucho tiempo ya en Social Media, hemos sido testigos del desarrollo de las redes sociales y las impresiones que causaron en las personas y organizaciones.
Uno de los puntos más sensibles en este aspecto fue la aceptación por parte de las empresas de este nuevo canal de comunicación. Sin embargo, podemos decir que esta etapa ha sido superada y que las actitudes de negación y miedo hacia esta plataforma, hoy por hoy, son mínimas.
Actualmente aparecen en escena, por un lado, la curiosidad y, por otro, la demanda de respuestas concretas sobre la energía, tiempo y dinero invertidos, en definitiva, los recursos que se ponen en juego en la Web 2.0. Esto es a lo que generalmente se denomina “retorno de inversión” o R.O.I., por sus siglas en inglés (return of investment).
Y es en la base de las estrategias de Marketing 2.0. que encontramos a la red de Mark Zuckerberg, puesto que es la primera a través de la cual los empresarios empiezan a ver con otros ojos a estos canales. Es en Facebook donde surge la pregunta sobre si realmente es tan bueno y en qué me brinda ventajas respecto a los medios tradicionales. Con respecto a estos interrogantes intentaremos dar nuestro top five de motivos por los cuales tu marca debe estar en Facebook.
- Aumento de ventas: Cualquier canal de comunicación y vínculo con un cliente -desde un local, una línea telefónica, un promotor ambulante, etc.-, aumenta la captación de personas a las que les atraiga nuestro producto o servicio. Facebook posibilita identificar intereses y actividades de los usuarios, lo que nos permite crear mensajes puntuales (segmentados) para alcanzar ese público objetivo de la marca.
- Posicionamiento: Actualmente las personas están dejando de buscar en la guía telefónica aquello que necesitan… directamente googlean. Teniendo en cuenta la frase popular “si no está en Internet, no existe”… figurar en las primeras menciones de los buscadores cuando se investiga el rubro de nuestra empresa es fundamental. Tener una cuenta en Facebook colabora a sumar puntos en los algoritmos de los motores de búsqueda y diferenciarnos de la competencia.
- Tráfico a nuestra web: Facebook es un canal que guía a los usuarios, a través de posteos específicos, hacia aquellas páginas de nuestra web que logren concretar una venta, captar información importante, etc., en especial cuando las publicaciones con links son impulsadas publicitariamente.
- Monitoreo: Los usuarios ya hablan de nuestra empresa en redes sociales; de nuestro rubro o de intereses que nuestra empresa puede captar. Mediante nuestra presencia en Facebook, podemos realizar un seguimiento estadístico de cuáles acciones, servicios, o productos atraen a nuestros clientes, tanto desde lo cuantitativo (cantidad de “me gusta” o veces que se compartió) como desde lo cualitativo (a través de los comentarios con opiniones, críticas, sugerencias, etc). En un contexto económico donde la información es vital para optimizar nuestra actividad, el gran potencial de datos que puede generar la presencia de la marca en Facebook suma una herramienta de marketing y ventas extraordinaria y que demandaría una estructura y tiempo mucho mayor si quisiéramos obtener esos datos a través de otro método.
- Precios bajos en comparación a los medios de publicidad tradicionales: ¿Cuánto cuesta contratar media página en el diario local? ¿Cuánto cuesta una pauta mensual en radio? Las inversiones en Facebook son mínimas en comparación con las necesarias en medios tradicionales para lograr el mismo nivel de alcance. Mientras que, teniendo la posibilidad de segmentar nuestro mensaje para que llegue exclusivamente al público que nos interesa (por género, edad, ubicación geográfica, intereses y muchos otros datos) se multiplica la eficacia de la inversión. Esto no significa dejar de lado las vías de contacto convencionales (seducidos por las posibilidades de la plataforma) sino que debemos integrar la gestión 2.0 al resto de las estrategias 1.0 de marketing.
Las acciones cada vez más específicas en Facebook se ajustan tanto a la demanda de los usuarios como a las características de las distintas actividades sociales y económicas. A medida que la marca vaya desarrollando su estrategia 2.0 descubrirá estrategias más concretas aún.
Tener presencia en Facebook habilita la posibilidad de que nuestros clientes nos elijan, que compartan nuestro contenido, que inviten al resto de los usuarios a conocernos, que tengan la posibilidad de hablar con la marca desde cualquier lado sin tener que pedir reunión con el Gerente o acudir al libro de Sugerencias / Quejas. A través de las redes sociales convertimos a nuestros clientes en FANS, y los fans no sólo compran y consumen, los fans reproducen a niveles virales su agradecimiento a nuestro servicio y su fidelidad a nuestra marca.